Gracias Concha, me has mimado en extremo, además creo que me conoce mejor que yo misma, jejeje.
Cierto es, que desde que vi el color de los calcetines, desee que fueran para mi. Reflejan los colores de mi otra pasión, EL MAR. Yo los miro y veo la arena, las olas del mar y el cielo. Y el patrón es una maravilla, siempre me ha dado miedo tejerlos, porque me parecen realmente complejos, pero ahora ya los tengo en mi poder y me encantan, encantan, encantan. ¿Ya he dicho que me encantan? jejejeje.
Pero los acompañantes también me han dejado sin habla, sobre todo esta lana para calcetines.
Hace años mi sobrina me trajo dos ovillos iguales de una tienda de Alemania y nunca más he podido encontrarla en tiendas on line. Si tienen oportunidad de tejer unos calcetines con ella, veréis que son maravillosos para las noches frescas de verano, si si de verano, como estos, ha sido una grata sorpresa.
Y tachaaaaaaaaan! este libro. Cuando lo he visto, he pensado, " ¿pero cómo lo sabia?". Pues si, tenía pensado comprarlo.
Bueno Conchi, dí la verdad, ¿tienes una bolita mágica? porque realmente me has dejado con la boca abierta y lo digo muy en serio, parece que me has estado espiando.
Pero esto no ha sido todo, miren menudo alijo.
¿Echan en falta algo? pues sí, los calcetines. Para verlos hay que dar un paseito playero.
Lucen mejor en su medio natural jejejeje.
Y como un año más, hay que dar las gracias a Pilar, que con tanto cariño y paciencia, organiza este encuentro entre tejedor@s de todos los rincones. Gracias también a las demás participantes, sobre todo a las que han estado ahí en blog y alma (y en el chat de ravelry). Y por último, pero no menos importante, dar las gracias a los dos chicos participantes, que nos han demostrado un nivelazo, que a mí, particularmente, me ha emocionado y sorprendido.
Gracias a tod@s, hasta el año que viene.